La memoria del olvido
Una gota de lluvia se puede perder fácilmente en la seca tierra, sin embargo, de muchas se crea inexorable un aguacero y, a la postre, un caudaloso torrente. Este libro es eso. Don Ricardo Díaz, con cada reminiscencia, nos arrastra a un caudal de emociones que solo lo propio de una vida puede proporcionar: recoger los frutos para crecer, aprender de ello lo necesario; aceptar lo primigenio de cada situación y transformar eso en fuerza.
Cuando pienso en este libro, imagino un cuadro de una bella pintura hecha de retazos; una hoja en blanco que de a poco es llenada con sutiles emociones y pensamientos... En definitiva, un viaje por la vida del autor, uno mágico e inusual, capaz de mover, y con aparentes pequeñas cosas, emociones que solo habitan en la pertenencia de un hombre que aprendió a usar de tinta su alma.