El depósito
La vida contemporánea presupone, como parte de su entramado de nuevos hábitos de consumo, la posibilidad de tener a nuestra disposición en un tiempo corto cualquier objeto fabricado en la otra punta del mundo. Tal vez porque simplemente no queremos saber, preferimos no hacer las incómodas preguntas: los objetos simplemente se compran y llegan a la puerta. El fotógrafo Felipe Malhue trabajó durante un tiempo en un depósito de contenedores del puerto chileno de San Antonio. Mientras lo hacía se propuso poner el foco en este mundo de etapas intermedias donde los trabajadores, los nuevos esclavos de la máquina global, se encargan de mover y custodiar estas mercancías que atraviesan los mares del mundo.