Reseña

Una zona de sacrificio es un área geográfica donde el gobierno autoriza la actividad de industrias contaminantes. De manera implícita, se entiende que los recursos producidos son tan importantes que se justifica la devastación de algunas localidades. En Chile se reconocen cinco zonas de sacrificio y, acaso la más simbólica, la conforma el parque industrial de Quintero-Puchuncaví-Ventanas, cordón de termoeléctricas y refinerías ubicadas en la quinta región, a pocos kilómetros de balnearios exclusivos y del Congreso nacional.

Esteban Contardo recorre el lugar y se sumerge en las repercusiones físicas y psicológicas de esta comunidad: testimonios de ciudadanos que nos acercan a la intimidad del horror y retratan la inadvertencia política de las últimas cinco décadas. Relatos sobre la intoxicación de escolares, la inactividad financiera, la lucha de activistas ambientales y, por supuesto, el dolor de los familiares de fallecidos o enfermos por la exposición a metales pesados. Con agudeza y sensibilidad, Náusea es una investigación esclarecedora sobre un escenario que —en plena crisis climática— podemos ver humeando desde la carretera.