Pic0 pal que lee
PICO PAL QUE LEE
Esto no es solo una frase rabiosa garabateada en un papel.
Es el grito de quien ya no aguanta más.
Diego fue ignorado por profesores, directores y adultos que prefirieron mirar “pa’l lao”, con ese discurso cómodo de; mejor aquí que allá afuera, donde se vuelven delincuentes.
Mientras tanto, él se partía por dentro.
Hasta que escribió lo que nadie quiso oír. Lo pegó en una estación de metro. Y pasó lo impensado:
Otros también empezaron a hablar. A escribir. A sacar la rabia, el dolor, el abuso.
El muro se llenó de verdades incómodas, esas que la sociedad prefiere tapar.
Esta novela no tiene moralejas.
Tiene gritos. Tiene historias que queman.
Y tiene a un chico que nunca quiso ser héroe, solo dejar de ser invisible.
Porque hay frases que no se olvidan.
Y esta, aunque moleste, aunque incomode…
es la voz de quienes ya no quieren callar.