Reseña

Este libro consiste en una extensa conversación/entrevista entre el Filósofo Alain Badiou y el Profesor Aude Lancelín. La entrevista gira en torno al significado de la palabra política hoy, en la perspectiva de una larga historia de traducciones y reescrituras. . Desde el principio de esta historia, hace algunos milenios, se pensaba que la política era la cuestión del poder, la cuestión de ocupar y ejercer el poder del Estado, respecto a colectividades constituidas, colectividades cuyos miembros eran conocidos e identificados. La primera definición considera, pues,
que la cuestión central, incluso única, de la política es la cuestión del poder del Estado. Es una definición simple, pero atraviesa toda la historia: aún puede encontrarse, por ejemplo, en los escritos de Lenin, y también en los nuestros, en una forma básica, cuando la política se reduce a la elección electoral de un presidente. Esta definición puede dar lugar a una concepción bastante cínica de la política, basada en la competición, la rivalidad e incluso la brutalidad, con el fin de conquistar el poder, establecerse en él y ejercerlo como mejor le parezca. Existen
teóricos de la política así concebida, el mayor de los cuales es sin duda
Maquiavelo. Maquiavelo describió de forma extremadamente sutil, positiva, se podría decir “técnica”, los diversos procedimientos que intervienen en la lucha por conquistar y mantener el poder, así como las cualidades que se requieren para ser alguien en este tipo de lucha. Maquiavelo ocupa una posición excepcional como teórico político, si entendemos la política en estos términos. Es [p.09] cierto que hoy no vemos mucho más que esta lucha, con todo lo que implica de villanía,
corrupción, mentira, violencia…Pero, después de todo el autor de El Príncipe ya había demostrado que estos ingredientes estaban fuertemente ligados a la cuestión de la política y su ejercicio. Frente a esta visión, en el curso de una historia muy agitada y compleja, y en estrecha colaboración con la filosofía, ha surgido otra concepción de la política: la que afirma que la política tiene una relación constitutiva con la justicia. Los filósofos se han esforzado por dar una definición precisa de la justicia a lo largo de su existencia histórica -no muy larga,
es cierto, unos veinte siglos-. Pero cualquiera que sea la definición, si incluimos la idea de justicia en la definición de la política, ya no podemos definirla simplemente como la conquista del poder. La pregunta central pasa a ser: ¿qué es el poder justo? Y el debate sobre la política no versa tanto sobre el ejercicio del poder, como sobre las normas a las que ese poder está sujeto, su relación con la comunidad y sus objetivos.