Crónicas de la impunidad
"Este es el intento de Olga Grandón en este libro: mirar hacia atrás, por dolorosos que sean los recuerdos.
Pero, ¿será necesario recordar, escribir sobre episodios borrados de la historia? Sabemos que quienes los provocaron se encargaron, primero de mentir: “esto no ha ocurrido, no aparece en los diarios”, luego, la represión y el silencio impuesto que impedían hablar, contar, escribir… Y aún, hoy, pasados 50 años y tres generaciones, la “gente”, el “ciudadano”, el “vecino” prefieren olvidar, aun cuando los medios siguen en manos conocidas de cómplices del golpe que provocó el descalabro", Soledad Fariña