Ni brujas ni santos
A la redacción de un periódico, reconocido por la profundidad de sus investigaciones y la calidad literaria de sus obituarios, llega una solicitud de la Secta del Secreto Ejecutor de la Afamada Memoria de la Madama Ivonne, requiriendo una reconstrucción histórica y objetiva que permita aclarar las oscuras circunstancias que rodearon la muerte por fuego de Madame y el exterminio de los miembros del famoso aquelarre de la foresta del Loira.
Con cierta dosis de humor, los personajes de esta ficción desenmascaran la sociedad criminal creada para la persecución de la herejía y la prédica de la Verdad: la Inquisición y el Santo Oficio, instituciones que entre los siglos XVI y XVII encarnizadamente persiguieron los crímenes “pacto con las brujas” y “posesión demoniaca”, usando la fuerza y la tortura para llegar a conocer la autenticidad de las confesiones.
Esta novela es el resultado del estudio encargado a los obituaristas, esos escritores olvidados que coquetean con la muerte. Vaya para ellos el reconocimiento del autor.