El espíritu sopla, síguelo
El camino de un ejecutivo comprometido
“A través de algunas experiencias, surgidas de encuentros, me gustaría compartir cuanto he recibido de los demás y del mundo. Mi deseo es devolver lo que he recibido.
Cuando creemos que tenemos un rol que desempeñar, el mundo se convierte en nuestro aliado para vivir nuestra vida plenamente, a través de alegrías, pero también a través de dificultades. A los más jóvenes y a los menos jóvenes, que trabajan en empresas o no, quiero compartir mi convicción de que es posible tener éxito en la vida siendo útil a los demás confiando en su guía interior, su estrella, sus talentos y, para quienes lo conocen -y pueden así invocarlo-, a Dios que habita en lo más profundo de nuestro ser.
Con ustedes deseo explorar algunos episodios de mi vida, que me han llevado a descubrir que más allá del hacer y del parecer, lo más importante, es el ser”.