Reseña

Pensar a Teresa Wilms Montt supone situarse en medio de la herida ante la vida, la muerte y el amor lejano, cuestión que busca erigirse ante una visión absolutamente sentimental y que se identifica, por tanto, con el cauce último del corazón. Pero esto no es lo único en la poeta, también se encuentra el intimismo con la naturaleza, la concomitancia con el aliento divino y aquella saeta que penetra la inquietud por esa anhelada ansia de infinito. A decir verdad, ella no solo escribe el poème, sino que también vive el padecere de una existencia rebelde y apasionada, asunto que se fusiona en la dualidad vida/obra. Lo anterior, debe comprenderse en todo el sentido de la palabra, porque la obra completa de ella, no es sino una mixtura entre lo vivido y lo escrito.