Confesiones de un adicto
Un mensaje de esperanza
El ser adicto es un estigma que llevaré tatuado en mi rostro por siempre. No lo quise ni lo busqué, pero estuvo presente gran parte de mi vida.
Esta es mi historia, descarnada, brutalmente sincera y realista, escrita con dolor y vergüen-za, pero también con un mensaje de esperanza para todas aquellas personas que se perdieron en la multitud.
Se puede salir si tu así lo quieres y lo decretas con toda tu alma. Yo pude, no es fácil, pero al final de tu batalla, permanecerás erguido por haber vencido.
“NO HAY VICTORIA SIN LUCHA”
"Es un libro que recomiendo por su relato hu-mano, sencillo y apasionante que mantiene al lector con el corazón apretado desde su inicio hasta su final. No me cabe duda que Julio escribió este libro con las lágrimas del alma."
VÍCTOR YÁÑEZ RIVERA.