Un temporal
Entre un temporal como tormenta y aguacero, y lo temporal como lo transitorio, se entreteje esta novela delicada de Ansilta Grizas que es también bitácora e inventario. Un puñado de objetos y fotos como pruebas de vida y resistencia frente al desgaste y la muerte. Una escritura de frases que se van hacia adentro para llevarnos con ella, con un duelo que es espera y la belleza de un padre que se deja entrever de a poco. “Me quiero olvidar del nombre de los remedios y los síntomas y los médicos, y quiero acordarme de todas las anécdotas de mi infancia, de todas las casas en que vivimos, de cuando construiste nuestra casa y la pintaste con tus propias manos”, dice la narradora en un momento.
Este Temporal nos trae todo eso.
Toda esa maravilla.
María José Navia