El verdugo
El encapuchado del Estadio Nacional
o conocían su nombre, se especulaban opciones, pero sin certezas. Nunca alguien supuso que algo así podría existir en la vida real ».
1973, Estadio Nacional, el coloso de cemento convertido en campo de concentración. La ominosa figura de un cuerpo cubierto por una frazada que se pasea por las galerías de la mole dejando una estela de muerte, y que los prisioneros han aprendido a temer. Un espectro que atormenta a las víctimas sobrevivientes años después de ocurrido los hechos, convirtiéndose con el tiempo en un cuento de terror acerca de un monstruo que se alimentaba de las sesiones clandestinas de tortura.
¿Cuántas veces traiciona el traidor?
En su primera novela, Pablo Otaíza evoca la época más sangrienta de nuestra historia reciente en un relato que con asepsia y precisión quirúrgica devela el proceso de desnaturalización de un hombre que termina convertido en bestia.
Una confesión que a su vez es una condena de muerte. Otaíza construye una prosa transparente y valerosa, capaz de recorrer los pasillos de la memoria abatida de un pueblo preguntándose si es posible algún tipo de redención.
Un relato ágil, directo y sin manipulaciones emocionales ni golpes bajos; tan solo la cruda refulgencia del horror.
Cristian Cristino