Reseña

Tras la Pandemia por el Sars-Cov-2, se ha puesto en evidencia la incapacidad de las
ciudades y viviendas de entregar espacios adecuados para una convivencia diaria en la
que vida personal, familiar, trabajo y educación se encuentran y desencuentran.
Si bien el espacio público tiene diferentes formas físicas, su expresión más abundante
en las ciudades chilenas es a través de calles, las que mediante estrategias de diseño
adecuadas pueden contribuir a los desafíos antes expresados y aportar en cada una de
dichas dimensiones.
El documento de propuestas es una invitación a darnos el permiso para hacer
cambios, a comprender cómo el diseño de las calles, sus materialidades y mobiliario,
generan oportunidades o inhiben posibilidades para las personas. Es una invitación a
asumir el espacio público como parte del ecosistema urbano, potenciando al máximo su
rol en la carbono neutralidad y adaptación al cambio climático, en la equidad urbana y en
la seguridad.
Las catorce propuestas contenidas en este documento poseen diferentes grados de
profundidad y desarrollo, sin embargo, todas en conjunto constituyen los cambios que
debieran estudiarse por parte de las diferentes instituciones para lograr convertir nuestras
calles en un espacio público para las personas.
El principal objeto de las propuestas del presente documento es promover una nueva
aproximación al diseño de calles en nuestro país, basado en las personas y los lugares,
evaluando siempre las necesidades locales de movimiento y permanencia.
Las propuestas giran en torno a 4 ámbitos:
- Reformular la normativa que regula el diseño de las calles en Chile
- Establecer estándares de calidad y equidad urbana y territorial de espacio público
en Chile
- Adaptar el diseño de infraestructura pública de vialidad por parte del Estado para
transformarla en corredores verdes y en infraestructura multibeneficios
- Potenciar y fortalecer el rol de los municipios y gobiernos regionales respecto de la
regulación, administración y gestión de los espacios públicos.