¿Conoces cómo conoces?
Hacia una epistemología de la psicoterapia
Imagina a una persona que siente angustia y que va a consultar a cuatro psicoterapeutas distintos para entender qué le ocurre. El primero le dice que presenta un conflicto no resuelto entre algunos mecanismos de defensa y ciertos impulsos libidinales (corriente psicodinámica). El segundo, que su angustia representa una conducta disfuncional aprendida y reforzada por ciertas creencias irracionales (corriente cognitivo-conductual). El tercero, que tal persona carece de un sentido de vida, lo que limita su tendencia inherente a la autorrealización (corriente humanista). El último, que su angustia es una manifestación particular e interaccional del sistema del que es parte (corriente sistémica). Pero ¿quién tiene razón? Todos y ninguno.
La forma en que cada corriente psicoterapéutica permite conocer los fenómenos psicológicos es diversa, aunque el hecho (la angustia) sea el mismo. Eso conlleva que un psicoterapeuta, al aferrarse a una u otra teoría, tenga comprensiones distintas del problema y, por ende, formas distintas de actuar sobre él.
Las teorías o corrientes psicoterapéuticas no son neutrales, epistemológicamente hablando o, en otras palabras, sus supuestos influyen en cómo se conocen los fenómenos psicológicos que aquejan a las personas. Transparentar y analizar tales supuestos mediante un método hermenéutico, sistemático y riguroso es el desafío de este libro.