Las formas del olvido
Formas del olvido
¿Se puede olvidar lo que no recordamos? Es una pregunta que surge al confrontar las
fotografías/imágenes de formas del olvido. Imposible descifrar lo incomprensible, solo las
sensaciones, emociones penetran en nuestras visiones. Pensar un presente
constantemente no es posible, el cotidiano se llena de movimientos rápidos y
vertiginosos, obstruyendo la capacidad de detenerse. Es la modernidad la que ejerce
poder sobre los sujetos que caminan por el mundo, desde ahí, la imagen se transforma en
recuerdos, recuerdos lejanos, si no fuera por la fotografía, así como fue/es la pintura, cual
fija el instante, se disiparía en el tiempo. El dispositivo fotográfico nos permite estar
suspendido en la atemporalidad, construyendo disimiles formas de recordar para no
olvidar.
La indagación del artista sugiera la construcción de un archivo des- construido, donde lo
que vemos, nos mira, como diría el filosofo francés, George Didi Huberman. Acontece,
entonces, un modo operante de relegar los recuerdos al papel, a la imagen intervenida
por el autor.