Diarios mágicos de niñas poderosas
En la infancia siempre soñamos con cómo será nuestra vida cuando seamos grandes, el mundo es
alcanzable con solo cerrar los ojos y echar a volar la imaginación. Pero ¿qué pasaría si en esta etapa de
la vida, donde no hay límites para soñar, nos regalaran un diario de vida? ¿Qué contendrían esas hojas?
¿Estarían nuestros sueños y pensamientos de infancia?
Al pensar en las grandes mujeres chilenas, nuestras heroínas, precisamente nos preguntamos qué
habría pasado si hubiesen tenido un diario de vida cuando eran niñas. ¿Qué habrían registrado en esas
hojas? ¿Habrían contado sus anhelos e ideas? ¿Cuáles habrán sido? ¿Cómo habrá sido la vida de esas
mujeres que lucharon por hacer de sus sueños una realidad? En este libro, imaginamos lo que estas
heroínas podrían haber escrito en sus diarios.
Cuando escribimos un diario y nos damos un tiempo a solas con lápiz y papel, nos hacemos un
regalo que nos permite aclarar nuestras ideas, crear soluciones y darnos la fuerza para seguir adelante.
¿Qué habría pasado si pudiéramos leer las reflexiones de la guerrera Janequeo (allá por el siglo XVI),
para saber de dónde sacó tanto ímpetu y convicción de lucha? En este libro, evocaremos la raíz de esta
fuerza espiritual. Asimismo, nos iremos acercando a nuestra época y podremos leer a Eloísa Díaz, la
primera mujer en estudiar medicina en Chile. Seremos testigos de su perseverancia, así como de las
claves para sortear cada obstáculo que se le presentó como pionera de la medicina. Luego, veremos la
sensibilidad y creatividad de Rebecca Matte, quien mostró su corazón a través de sus esculturas.
En un diario de vida, traspasamos en papel nuestras inquietudes y esperanzas, volcamos nuestro
verdadero ser con éxitos y fracasos… Así, en este libro, nos adentraremos en la vida de la niña Lucila
Godoy, quien con sus sueños convertidos en letras desplegó la fuerza interior que después la llevó por el
mundo luchando por sus ideales. Del mismo modo, seremos cómplices de Rosa Medel al sumergirse en
el mar, cuya valentía y preocupación por los demás primaron en su vida. Más adelante, seremos testigos
de las ideas de Elena Caffarena y del camino que debió recorrer para que las mujeres lograran votar en
Chile.
Al escribir un diario personal, relatamos una historia donde nosotros somos los y las protagonistas.
Allí podemos leer nuestra visión de todo lo que vivimos y cómo lo sentimos. Aquí, podremos ver cómo
Violeta Parra lideró su vida y proyectó su ser en sus canciones, bordados y cerámicas, los cuales son un
reflejo de cada emoción y experiencia vivida. Asimismo, valoramos por los cielos con Margot Duhalde y
sus relatos del aire, cuyo poder de decisión permitió que llegara a ser lo que ella quería. Después,
veremos a María Teresa Ruiz y su estrecho vínculo con cada estrella, planeta y galaxia.
Cuando se escribe con el alma libre, sin esquemas y solo a partir de la propia experiencia, podemos
encontrar un tesoro repleto de aprendizaje, de historias familiares y las raíces de nuestro ser. Es así
como, finalmente, la historia de Marta Salgado da cuenta del encuentro con sus ancestros y sus
aprendizajes, y su incesante lucha por la identidad afrochilena.
Por último, los diarios de vida de heroínas como los que imaginamos en este libro se transforman
en una herencia, una contribución a nuestras propias vidas. Nos muestran cómo estas mujeres salieron
adelante con muchas menos herramientas que las que hoy poseemos.
¿Y nosotras y nosotros? ¿C